La lectura es mucho más que una habilidad escolar: es una herramienta poderosa para el crecimiento cognitivo, emocional y social de las personas. Entender sus generalidades permite valorarla como un hábito transformador, capaz de abrir puertas a nuevas ideas, culturas y formas de pensar.
¿Qué es la lectura?
La lectura es un proceso de comprensión e interpretación de signos escritos. A través de ella, las personas acceden al conocimiento, desarrollan el pensamiento crítico y enriquecen su mundo interior. No es solo decodificar palabras, sino comprender significados, contextos y emociones.
Isabel Solé (2017) define la lectura como un proceso de construcción activa de significado entre el lector y el texto.
¿Por qué es tan importante?
La lectura fortalece el desarrollo cognitivo al estimular la memoria, la atención y la capacidad de análisis. Emocionalmente, permite identificarse con personajes, comprender sentimientos y desarrollar empatía. A nivel social, favorece la comunicación, la participación ciudadana y el respeto por la diversidad.
La UNESCO (2005) reconoce la lectura como base del aprendizaje a lo largo de toda la vida y como un derecho humano esencial.
Tipos de lectura y géneros literarios
Los distintos propósitos dan lugar a diferentes tipos de lectura:
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Lectura informativa: para obtener datos o conocimientos específicos.
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Lectura recreativa: con fines de entretenimiento o reflexión.
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Lectura crítica: para cuestionar, analizar y argumentar ideas.
Y dentro de cada tipo, los géneros literarios enriquecen la experiencia: narrativa, poesía, ensayo, teatro, entre otros, cada uno con sus propias formas de expresión y estructuras.
Técnicas de comprensión lectora
Para mejorar la comprensión y disfrute de la lectura, es útil aplicar estrategias como:
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Formular preguntas antes, durante y después de leer.
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Hacer resúmenes o esquemas.
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Relacionar lo leído con experiencias propias o con otros textos.
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Identificar ideas principales y secundarias.
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Visualizar lo que se lee.
Estas técnicas ayudan a convertir la lectura en una actividad más activa y significativa.
¿Cómo fomentar el hábito lector?
Promover la lectura es un trabajo conjunto entre familias, educadores y comunidades. Algunas estrategias prácticas incluyen:
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Leer en voz alta con niños y niñas desde edades tempranas.
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Crear espacios atractivos para la lectura (rincón lector en casa, club de lectura, etc.).
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Permitir libertad de elección de libros, respetando intereses personales.
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Usar tecnología a favor: audiolibros, apps de lectura y libros digitales.
Bibliografía:
- Cassany, D. (2006). Tras las líneas: sobre la lectura contemporánea. Editorial Anagrama.
- Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). (2005). La alfabetización en el mundo: Informe de seguimiento de la EPT en el mundo 2006. https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000141639
- Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). (2019). PISA 2018: Resultados clave. https://www.oecd.org/pisa/
- Solé, I. (2017). Estrategias de lectura. Editorial Graó.
- Ministerio de Educación Nacional de Colombia. (2020). La lectura: una puerta hacia el aprendizaje. https://www.mineducacion.gov.co/
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